GRETEL LEDO en CNN en Español. Analiza el llamado al Diálogo de la Presidenta

sábado, 16 de agosto de 2008

Retenidos en el vientre

Por Gretel Ledo (*)



Jesús dijo: “Os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca”.
Juan 15:16


Cada uno de nosotros fuimos creados, escogidos y llamados para fructificar y producir. La producción está ligada a la generación de frutos. Cuando nos enfrentamos a aquella persona que no los da indudablemente está seca. Su trabajo resulta estéril.

Al momento de ser creados a la imagen y semejanza de Dios recibimos la tarea de fructificar y multiplicar. Producir es, de alguna manera, manifestar aquello que ha estado presente desde el momento de nuestra concepción, es decir, el don divino.

Lo cierto es que hemos sido bautizados desde antes de la formación en el vientre de nuestra madre con un talento específico. El desafío es descubrirlo y potenciarlo. Cuántos casos observamos hoy en día de jóvenes que comienzan una carrera universitaria y al tiempo la abandonan por no sentirse seguros de lo que eligieron. Cuántas personas aún no encontraron el propósito para el cual han sido creadas y bucean buscando su propio destino. El mayor precio que se paga es la pérdida de tiempo y con ello el hartazgo en la continuación de un proyecto. Seres inconclusos que divagan probando opciones, desviando metas, dejándose llevar por proyectos ajenos al talento propio.

Si lleváramos esto al plano de nuestra nación indudablemente debemos reconocer que cada estado soberano también cuenta con ciertas particularidades que lo distinguen del resto. Si se quiere podemos catalogarlas como bendiciones naturales. Argentina por su latitud goza de una variedad climática que le posibilita sembrar en el lugar menos pensado y esperar a cambio una cosecha inmejorable. Otros países tendrán características vinculadas al sector servicios, tecnología e industrias. La formación intelectual de muchos de nuestros científicos resulta codiciada por el extranjero al igual que la fertilidad de nuestras tierras; entonces, ¿qué nos pasa a nosotros que no lo valoramos? ¿Será que aún no hemos descubierto cuál es el potencial argentino?

Hemos visto en el conflicto con el campo que en vez de premiar a quienes producían más, se los castigaba. Aún hoy a nivel gubernamental no se ha trazado una política agropecuaria a mediano y largo plazo. Los gobiernos pasan y las políticas deberían permanecer. Pero en nuestro país la dirigencia considera más importante pasar a la historia con hechos individuales que con acontecimientos colectivos. Es preciso que nos destaquemos no por la inmediatez en la resolución de conflictos que en sí misma es importante, sino más bien por la previsibilidad en los mismos.

La habilidad para llevar adelante el trabajo de producción está completamente ligada a la manifestación de los dones y talentos naturales; para el caso de un país implica hacer uso de sus fuentes de riquezas para posicionarse estratégicamente por encima de sus competidores. Quizás, y lo más grave, no es que no sepamos cuáles son nuestros recursos específicos o cómo explotarlos sino que se antepone el interés individual del sujeto de turno al frente de un gobierno por encima del interés colectivo y nacional en pos del bienestar general. Aquí resaltamos la falla y la reincidencia que tiene nuestra dirigencia en perpetrar sus objetivos relegando las promesas de campaña para un futuro que nunca llegará a ser tal. ¿Tendríamos que pensar seriamente en implantar un voto de censura para evitar la espera hasta un fin de mandato a la hora de evaluar una gestión?

Asistimos a un escenario forjado por una historia paralela. Una historia signada por realidades contrapuestas. Por un lado nos jactamos de un superávit comercial abultado, una fortaleza en nuestras reservas inmejorable. Y, por el otro, el riego país está por las nubes, las inversiones internacionales brillan por su ausencia y sólo Venezuela nos presta dinero a un 15%.

En su Crónica de una muerte anunciada Gabriel García Márquez mezcla mito y realidad. Santiago Nasar era el único que no sabía que iba a ser asesinado. En su alrededor había olor a muerte pero él no lo percibía. Todo se enmarca en un realismo mágico que busca insertar lo extraordinario en la normalidad de lo cotidiano: imposibilidad de acceder al conocimiento de la verdad, violencia, fatalismo y honor utilizado como un implacable mecanismo de venganza al que hay que acudir para restaurar el orden de la moral colectiva.

Los analistas internacionales encuadran a la Argentina como un problema analítico a la hora de trazar un estado de la cuestión. Es que internamente se respira un aire distinto al que flota afuera. Todos saben cómo terminará la crónica, menos Argentina. La pregunta es: ¿lo sabe nuestro gobierno? ¿Será que conoce por dónde pendula el maremagnum de catálogos internacionales y no puede modificarlo? ¿No puede o no quiere? ¿Existen compromisos ajenos al común denominador del enfoque ciudadano que nos impiden dar a luz una patria independiente?

El fruto retenido en el vientre siempre estuvo allí gestándose sigilosamente a la espera del grandioso nacimiento. El niño está a punto de nacer pero su madre no desea darlo a luz. Así está nuestra querida Argentina. El gobierno no se decide o bien lo hace equivocadamente.

Especulan los de afuera intentando dar respuesta a preguntas simples: ¿por qué no prospera Argentina con el capital natural que tiene? El mayor problema es la indecisión a la hora de tomar las riendas certeras para saltar la valla que nos catapulte al merecido éxito. Dar a luz no es sólo un hecho natural, también es un acto voluntario. ¿Faltará voluntad o acaso capacidad para el desenlace?

El mundo sabe de la benignidad de nuestro suelo, no entiende el actuar de los administradores, los empresarios no arriesgan sus capitales en inversiones. Es oportuno que el gobierno no desoiga estas posturas sino que arriesgue medidas que de una buena vez hagan nacer los cimientos vitales de una nueva Argentina.


Buenos Aires, 16 de Agosto de 2008.


(*) Abogada en Derecho Administrativo
Politóloga en Estado, Administración y Políticas Públicas

Nueva Generación Moral
http://www.ledogretel.blogspot.com/

2 comentarios:

HUGO.TURRINI dijo...

Gretel: cuando creo que he leído lo mejor de tu producción, siempre me sorprendés con algo aún más brillante!! EStos son los artículos que me importan. No los que definen todo e intentan dar soluciones,sino los que nos llevan al cuestinamiento permanente.
También me pregunto acerca del "voto de censura". Puede ser útil. De existir debe ser rigurosamente reglamentado, ya que lo "ciclotímico" del argentino cambiaría de gobierno todos los días (en un país en donde un equipo pierde un partido y debe irse el técnico,jaja). Debería existir, con ese equilibrio que anuncio. Acerca de si no encuentran el rumbo o si este es elrumbo, aún me quedan dudas. Un beso.

Gretel Ledo dijo...

Estoy de acuerdo contigo Hugo. Es difícil una posible implementación de voto de censura. Creo que el mayor desafío sea quizás su regulación.
Un abrazo


DIRIGIR SIRVIENDO

Simplemente porque cada una tiene un don, un talento, un actor dentro de sí que es preciso “despertarlo” del encanto de un sueño que a veces es la propia vida.

Eso no tiene valor. Si cada uno comprende que para poder dirigir, hay que primeramente poder servir, la dirigencia política de nuestro país sería otra.

En este camino estamos y dichosos quienes lo transitamos hoy, y no lo dejamos para otros...


Comentario desde Lima, Perú

Es cada vez menos frecuente -y diría extraño- encontrar en nuestros tiempos organizaciones lideradas por jóvenes que tengan como premisa fundamental y abierta practicar los principios morales y éticos al incidir en la política y transformar la realidad. Y que esto se refleje en los artículos es menos frecuente aún.

Acciones como esa necesita más la Argentina, en particular, y América Latina en general.

Mis mejores deseos para que esta iniciativa vea fructificar sus nobles esfuerzos.

Con aprecio,

Lic. Beltrán Gómez Híjar

Lima, Perú

Comentario desde Barcelona, España

Agradezco mucho vuestra invitación. ¿De dónde es el grupo? ´¿Cuáles son exactamente sus objetivos? Realmente hace falta a la sociedad actual, enseñarle lo que verdaderamente es ética, moral, cordura y sentido común.
Estoy muy interesado en vuestro proyecto. Yo soy político también, y rector de la Comunidad Ecúménica de San Jorge en Sant Boi de Llobregat, Barcelona. España. Mi nombre es Jordi d'Alemany.
Recibid todo mi apoyo y contad conmigo para lo que haga falta.
Jordi
5-09-08

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Rta. desde NGM:

Bendiciones. Ha sido grata su conexión. La historia nos muestra que siempre fue necesario adiestrarnos moralmente para realizar algo nuevo. Hemos elegido este tiempo de la historia para determinar que sin moral no hay Nación.
A pesar de ser un concepto genérico y por ocasiones abstracto, nace en la necesidad de hacer saber al hombre que sin ética nunca jamás podrá construir nada.